Sociedad

Restaurante Warynessy y Castillo de la Atalaya, cóctel perfecto para las “Villenerías 2011” (Galería fotográfica)

Durante este fin de semana, y con los ojos puestos en el cielo, Restaurante Warynessy ha celebrado la 15ª edición de uno de los eventos sociales y gastronómicos más conocidos de los que se realizan en nuestra ciudad. La explanada del Castillo de la Atalaya acogió cada día a más de 400 comensales en esta muestra gastronómica “Villenerías 2011”, donde los platos principales del menú fueron el Trigo Picao y los Gazpachos Villeneros.
Desde la 11 de la mañana, en la explanada de la puerta principal del Castillo, los artistas pertenecientes a la asociación Artekarana estuvieron pintando cuadros, comentando con el público los pormenores de cada una de las obras. Al mismo tiempo diferentes bodegas de la zona ofrecían sus caldos a todo aquel que se acercó a las carpas instaladas, y un mercadillo medieval terminaba de poner el encanto que el entorno del castillo de la Atalaya ofrece.

Un torneo medieval, a cargo de la Asociación de Vecinos del Rabal, dio paso al desfile de la escuadra de Tuaregs –que a los sones de la charanga que amenizó las horas anteriores a la comida– desfiló hasta el mirador, donde se habían instalado las mesas con las viandas preparadas para el menú, dando paso, una vez terminado el recorrido, a la comida. Casi toda la Corporación asistió a la cita, al igual que los fieles comensales de las “Villenerías” que, como todos los años, acudieron a su particular cita con la familia Navalón (gestores del Restaurante Warynessy), que ha demostrado el potencial de nuestro casco histórico para realizar actos de cualquier índole, en esta ocasión gastronómico.

A pesar del traslado desde el restaurante hasta el mirador del castillo, el espíritu de las “Villenerías” se ha mantenido en todo momento, pues los menús han estado elegidos para ofrecer los platos de cuchara más representativos de la gastronomía villenense –como son el “Trigo Picao” y el “Gazpacho villenero”– y postres tan peculiares como el “Pastel borracho” y la Milhoja de merengue”, que acompañados de vinos de la zona y la profesionalidad del equipo humano de Restaurante Warynessy han creado un precedente difícil de igualar.

Estas jornadas gastronómicas tuvieron un apéndice musical en la noche del viernes, en el mismo lugar donde en la mañana siguiente y la mañana del domingo se celebró la comida, Paco Cherro con el dúo “Eria”, el grupo “Ingresó Cadáver” y el discjockey Juan de Villena hicieron las delicias de los amantes de la buena música, que disfrutaron de un concierto a los mismos pies del castillo con un lleno total a pesar de estar Dani Martín en la Plaza de Toros.

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